Este núcleo, puerta de entrada al valle del Nansa, conserva un viejo molino, hoy en ruinas, que sirvió como fábrica de harinas.

Existía un antiguo muelle denominado Puerto de Reocín donde se cargaban y descargaban los navíos que llegaban con sal y otros bastimentos como hierro. Posteriormente sacaban carbón y hierro labrado de la ferrería de Cades. Aún hoy se puede acceder a él a través de un pequeño canal de río, donde se ubicaba el embarcadero, hoy conocido como “El Salín” en honor a él. En Muñorrodero se sitúa la Cueva de Fuente Salín, con pinturas rupestres del Paleolítico Superior. Lamentablemente no es posible visitarla debido al colapso de los accesos y la inundación del interior de la cueva.