El agua que produce la energía eléctrica en la Central de Trascudia es guiada por un canal de 7 km, que transporta unos 15.000 l/s desde el embalse de Palombera hasta un depósito a cielo descubierto.

En funcionamiento desde 1949, el agua canalizada baja desde el depósito (a cielo descubierto), ubicado en Cabanzón, por un túnel excavado en la roca y llega mediante una tubería curvada que cruza de margen a margen el río Nansa, hasta introducir el agua en el interior de la Central donde chocará con dos turbinas, pudiendo producir una potencia de 7.400 kw.


Esta central está en una zona de destacable belleza, especialmente por el pequeño salto de agua natural donde se juntan los cauces del río principal con el de su afluente, el río Supino.


Por esta central hidroeléctrica pasa la Senda Fluvial, perfectamente señalizada y acondicionada que discurre entre caminos y pasarelas de madera. Se puede apreciar un ambiente de ribera en todo su esplendor, disfrutando de la vegetación (alisos, sauces, fresnos, espinos y avellanos) y fauna (salmón ibérico, la trucha, nutria,…) que habitan en este corredor fluvial. Además en el recorrido se pueden contemplar paredes calizas, donde se puede practicar la escalada, o singulares acondicionamientos que nos recuerdan la actividad de la pesca en este río.