Monumental edificio construido en el siglo XVIII que conjuga el estilo barroco madrileño de la época de los Austrias con elementos propios de la arquitectura tradicional cántabra.

Ubicado en la localidad de Carmona, declarada Bien de Interés Cultural en la categoría de Conjunto Histórico, fue reedificado en el año 1715 sobre el antiguo solar por orden del canónigo Don Francisco Díaz de Cosío, según reza en su fachada principal.


Su estructura se compone de tres cuerpos, uno central de planta cuadrada y dos alturas, y dos torres de planta cuadrada y tres alturas que sobresalen. Se cubre con tejado a cuatro aguas y su fábrica es de piedra, alternado la sillería, presente en la fachada principal y en vanos, y el sillarejo en el resto.


La fachada principal, orientada al Sur, está realizada completamente en sillería. Destaca en ella las arcadas de medio punto que dan paso al soportal donde se aloja la puerta de acceso; la línea de imposta que marca la división en altura de la vivienda; los balcones volados con balaustrada de hierro forjado sobre ménsulas de piedra; y, el imponente escudo cuartelado que sostiene la representación de dos soldados, donde aparecen las armas de los Díaz, Cossío, Calderón y Mier, y su lema “Adelante los Mier por más valer”.


En los últimos años el edificio fue transformado en Parador Regional y en la actualidad se encuentra cerrado debido a las obras de mejora que se están acometiendo, las cuales no han afectado en gran manera a su esencia y a su estructura histórica.